Una IA para gobernar España y Catalunya en plena campaña por un YIMBY tecnológico
Sam Altman arma una junta directiva de OpenAI potente a las puertas del posible anuncio de GPT-5 mientras Elon Musk libera el código de su chatbot Grok.
A las pocas horas de publicarse la semana pasada Algoritmo Transparente (Se buscan guionistas para la serie 'Succession' de la Inteligencia Artificial), OpenAI anunciaba la ampliación de su junta directiva con tres mujeres que aportan sensibilidades muy necesarias para la nueva etapa, el retorno del CEO Sam Altman a la junta, y se cerraba la investigación de WilmerHale tras entrevistar a directivos y asesores y analizar más de 30.000 documentos. La auditoría concluye que en noviembre pasado se produjo una pérdida de confianza entre la junta anterior y Sam Altman, pero que a éste no se le puede reprochar nada en relación a la seguridad del producto, el desarrollo, las finanzas de OpenAI o sus declaraciones a inversores y socios. Altman y Greg Brockman aparecen reforzados tras ese informe para continuar liderando la empresa de ChatGPT, DALL·E y Sora. Eso sí, la nueva junta anunció mejoras importantes en la estructura de gobernanza de OpenAI, que incluyen:
La adopción de un nuevo conjunto de directrices de gobernanza corporativa.
El fortalecimiento de la Política de Conflicto de Intereses de OpenAI.
La creación de una línea directa de denuncias anónimas para todos los empleados y contratistas de OpenAI.
La creación de comités adicionales de la Junta, incluido un comité de Misión y Estrategia enfocado en la implementación y avance de la misión de OpenAI.
La nueva junta directiva de la empresa estrella en Inteligencia Artificial está ahora formada por:
Sam Altman - CEO de OpenAI, quien se reincorpora a la junta directiva.
Dr. Sue Desmond-Hellmann - Ex CEO de la Fundación Bill y Melinda Gates, con experiencia en liderazgo de organizaciones globales y entornos regulatorios complejos. Actualmente, es miembro de la junta directiva de Pfizer y del Consejo de Asesores del Presidente sobre Ciencia y Tecnología.
Nicole Seligman - Ex EVP y Consejera General Global de Sony y Presidenta de Sony Entertainment. Actualmente, es miembro de la junta directiva de Paramount Global, MeiraGTx Holdings PLC, e Intuitive Machines, Inc.
Fidji Simo - CEO y Presidenta de Instacart, con experiencia en tecnología de consumo y liderazgo de operaciones. También es miembro de la junta directiva de Shopify.
Adam D’Angelo - Continúa como miembro de la junta directiva.
Larry Summers - Continúa como miembro de la junta directiva.
Bret Taylor - Presidente de la junta directiva de OpenAI.
Tres mujeres y cuatro hombres. Y una cuarta mujer que desde enero actuaba como observadora en este impasse, Dee Templeton, vicepresidenta de Microsoft, de quien ahora no sabemos bien qué papel desempeñará porque Desmond-Hellmann será, por la vía de Bill Gates, un buen vínculo con Microsoft y con su CEO, Satya Nadella, el ‘Florentino Pérez’ de la IA según el último episodio del podcast Monos estocásticos. El último episodio de IA Innova también profundiza en los entresijos del ‘Succession’ de la IA que propusimos la semana pasada.
De la anterior junta tenemos dos defensoras del altruismo efectivo (Helen Toner y Tasha McCauley) que fueron víctimas del pulso con Altman y que tuvieron que dimitir tras la revuelta interna de la plantilla, y un Ilya Sutskever, el exjefe científico, que sigue en OpenAI pero con un perfil más que bajo, desaparecido. Seguiremos atentos viendo cómo evoluciona Ilya, que habla menos que la CTO Mira Murati, que este miércoles fue entrevistada por The Wall Street Journal, donde dijo que Sora —el generador de videos de OpenAI con instrucciones de texto— llegará al gran público durante este 2024.
OpenAI tiene una junta potente y sin altruistas efectivos porque ya está Elon Musk con su Grok de código abierto
Así las cosas, y ante los rumores que GPT-5 estaría al caer, Altman está fuerte, tiene una nueva junta a medida potente y bien connectada con Microsoft y con Washington, y la organización ha soltado lastre de altruismo efectivo a nivel de cúpula interna porque ahora el mayor defensor de estas tesis es el gran Elon Musk, qué ironía. Los correos que difundió OpenAI ya los comentamos aquí la semana pasada, pero estos días la novedad ha sido que el propietario de la red social X y de su chatbot Grok ha anunciado que será de código abierto. Tras la demanda y tras exigir el cambio de nombre de OpenAI a ClosedAI —hay que reconocer que el tío tiene gracia—, Elon ahora libera el código de Grok en lo que parece una partida doble: el del ‘open source’ y el de la (in)corrección política.
Para no reincidir en el pulso de la serie ‘Succession’ de la IA entre Altman y Musk, creo necesario dejar constancia de un par de noticias relevantes de esta semana y que nos invitan a la reflexión. La primera es el acuerdo de OpenAI con Le Monde y El País, referentes impresos en francés y español, para alimentar ChatGPT y permitir que el chatbot tenga acceso a sus noticias. Es el último de una serie de acuerdos con editores de medios en una línea opuesta a la estrategia de la demanda por derechos de autor de The New York Times.
Podremos leer noticias de Le Monde y El País en ChatGPT. A diferencia de la demanda de The New York Times por derechos de autor, los diarios francés y español pactan con OpenAI.
Como usuario, prefiero los pactos de OpenAI con Axel Springer y ahora con Le Monde y Prisa. Como defensor de una IA alimentada con contenidos de calidad, también. Como periodista y como sector, no tengo del todo claro que la vía del litigio del NYT sea mejor que la del acuerdo de Axel Springer, Prisa y Le Monde. Y como hablante de una lengua no global, tengo claro que es mejor pactar y que los medios tengan un retorno de la alimentación de la IA con contenido en lenguas oficiales sin un estado o una gran potencia detrás. En este último aspecto, el anuncio de un GPT público del Gobierno de España en castellano, catalán, gallego y euskera, debería contar con la garantía de que ello no conllevará el abandono de líneas estratégicas para el entrenamiento de las grandes IAs globales y privadas —esta ha sido semana de comparativas y de Claude 3 siguiendo sacando pecho— con contenidos que favorezcan la presencia de lenguas y culturas, sin excesivos postureos wokes.
Después del cirio de esta semana en la escena política española y catalana, con dos gobiernos con presupuestos prorrogados este 2024 justo cuando venían más recursos de Europa y se habían anunciado tantos proyectos e inversiones en Inteligencia Artificial, tecnología, audiovisual y transformación digital, con nuevas elecciones paralizantes y una italianización de la política que aleja (aún más) al administrado de las administraciones y de sus gobernantes, de la clase política en general, el tema quizá no debería ser invertir en un ChatGPT con las lenguas cooficiales del Estado sino en poner a la IA al mando de lo público: administración y gobiernos. Permitidme la ‘boutade’, pero ¿alguien se cree que la Inteligencia Artificial lo haría peor que los líderes y partidos que están permitiendo la pérdida de competitividad y progreso colectivo que esta pérdida de presupuestos supondrá para España y Catalunya? Cuando el cuñado anti-IA os hable mal de la tecnología, hacedle esta pregunta.
Polémico nombramiento de un altruista efectivo en el Gobierno de EE.UU. mientras Europa aprueba su AI Act
Leo en Paréntesis MEDia: “El Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST), una agencia del Departamento de Comercio de Estados Unidos, se encuentra en medio de una crisis interna. Miembros del personal y científicos han amenazado con renunciar ante el nombramiento anticipado de Paul Christiano, un investigador de inteligencia artificial conocido por sus lazos con el movimiento de altruismo efectivo y su derivado, el longtermismo, para un puesto crucial, aunque no político, en el recién creado Instituto de Seguridad de IA de EE. UU.”
Quiero interpertar esta polémica como una victoria del tecnooptimismo, o una derrota de los catastrofistas, como queráis decirlo. Porque las posiciones excesivamente radicales o un altruismo efectivo integrista ya no están en posesión de la verdad sobre el desarrollo de la IA. Tampoco en Estados Unidos. De la misma manera que en el mundo analógico el movimiento NIMBY (Not In My Backyard) ha provocado la reacción de un movimiento YIMBY (Yes In My Backyard), en la Inteligencia Artificial y la tecnología —y tiene mérito decirlo la misma semana de la aprobación en el Parlamento Europeo de la primera AI Act del mundo— surgirá tarde o temprano un progresismo alineado con las tesis desarrollistas o valientes respecto a la IA. En Europa, los partidarios de esta tercera vía —entre catastrofistas inmovilistas y aceleracionistas irresponsables— tendrán que articular una praxis y un discurso mientras se aplica la nueva ley europea. ¿Será posible defender el YIMBY en IA en Europa con la ley que se acaba de aprobar en los últimos coletazos de la legislatura? Para mí, esa sería la cuestión.
Voy acabando, porque la semana también nos ha proporcionado algún episodio divertido: Midjourney acusa a Stability AI de robar sus imágenes generadas mediante IA. Midjourney sospecha que hay ingenieros de Stability AI tras un robo masivo de imágenes y de los prompts asociados a ellas, de tal manera que, como comentan Antonio Ortiz y Matías S. Zavía en su podcast, se daría la paradoja de estar entrenando IAs de generación de imágenes con contenidos generados por IA y no por humanos. No me quiero imaginar qué imaginario y patrones estéticos surgirán de unas IAs que partan de un archivo mayoritariamente de imágenes artificiales, si ya actualmente salen los resultados que salen. Más material de la semana: Microsoft Copilot se potencia con GPT-4 Turbo gratuito; Meta desarrolla un modelo de IA gigante para potenciar su ecosistema de video completo; Madonna explora la frontera de la IA; Marilyn Monroe Digital: Un chatbot despierta el debate ético; BypassGPT hace indetectables los textos de IA; La Inteligencia Artificial podría revolucionar Hollywood; Apple compra DarwinAI demostrando que va en serio en la inteligencia artificial; Lo que debes saber sobre la ley que busca prohibir TikTok en EE. UU. y Mediaset crea una presentadora por inteligencia artificial para conducir un formato de 'Supervivientes' en Mitele.
Si queréis conocer a Jon Hernández, uno de los divulgadores de IA más seguidos en YouTube (su canal), os recomiendo esta entrevista en Prompt Project.
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Algoritmo Transparente #24