Mira Murati, de Albania a Silicon Valley como arquitecta de la inteligencia artificial en OpenAI

Ha trazado un camino impresionante desde sus humildes comienzos hasta convertirse en una de las figuras más influyentes en el campo de la IA

Justo el día del primer aniversario de ChatGPT OpenAI ha oficializado el retorno de Sam Altman como CEO de la compañía, pero se queda fuera de la junta directiva. También se reincorporan con él Mira Murati como jefa de tecnología (CTO) y su aliado Greg Brockman como presidente, pero sin silla en la nueva junta, formada provisionalmente por tres consejeros (ya los conocéis gracias a este blog: Bret Taylor,Adam D’Angelo y Larry Summers).

La novedad no es tanto el retorno ya anunciado de Altman y Brockman, y la continuidad de Murati como CTO después de haber sido la CEO más efímera de la historia de la compañía, incluso más breve que Emmett Shear, que ya es decir: duró 52 horas. (En el último podcast de Monos estocásticos, Antonio Ortiz rinde homenaje al bueno de Emmett por haber sido el CEO más exitoso de todos los tiempos: fichó a Altman para sustituirle, subieron las acciones una barvaridad y se tomó con mucho humor en X su salida.)

La novedad del día es que Microsoft tendrá un consejero en la nueva junta, con voz pero sin voto. O sea, alguien que pueda informar al ganador de todo el embrollo, el CEO de Microsoft, Satya Nadella, de quién os prometo un perfil en los próximos días en este blog. Este 30 de noviembre, OpenAI ha formalizado el retorno de Altman, quién ha enviado un comunicado a sus fieles trabajadores junto al nuevo presidente de la junta Bret Taylor. La compañía de ChatGPT acaba el mes de noviembre con los líos internos encarrilados, y habiendo relegado al errático Ilya Sutskever, el guardián de las esencias de la IA segura.

Hemos conocido a las dos consejeras que saltan de la junta de OpenAI por altruistas (Tasha McCauley y Helen Toner), pero quién es Mira Murati?

Sutskever, Altman, Murati y Brockman, de izquierda a derecha. / Wired

De Albania a Silicon Valley, un trayectoria fulgurante

Mira Murati (Vlorë, Albania, 1988) es actualmente la máxima responsable tecnológica (CTO) de OpenAI, la empresa detrás de ChatGPT, el chatbot conversacional que está revolucionando el mundo de la inteligencia artificial. Su fulgurante trayectoria académica y profesional la han convertido en una de las personalidades más influyentes del sector tecnológico.

Tras graduarse en Ingeniería Mecánica en Dartmouth College, Murati completó prácticas en el banco de inversión Goldman Sachs, donde trabajó como analista de datos. Más adelante, en 2012, se incorporó a la empresa aeroespacial francesa Zodiac Aerospace como ingeniera.

Su siguiente hito profesional llegó en Tesla, donde fue nombrada jefa de producto para el desarrollo del modelo X. Allí pudo aplicar sus conocimientos ingenieriles en uno de los vehículos más innovadores del momento. Tras dejar Tesla en 2016, Murati pasó a dirigir el área de Producto e Ingeniería de Leap Motion, una startup dedicada a la realidad virtual y aumentada. Bajo su liderazgo, Leap Motion lanzó un revolucionario software de seguimiento de movimientos de las manos para RV.

En 2018, Sam Altman convenció a Murati para unirse a OpenAI, una pequeña empresa fundada dos años antes junto a figuras como Elon Musk y Peter Thiel. Como vicepresidenta de IA Aplicada, Murati comenzó a trabajar en estrategias de computación avanzada y a gestionar equipos de investigación punteros.

Su visión y tesón fueron claves en el desarrollo de modelos de lenguaje revolucionarios como GPT-3 y, finalmente, ChatGPT y Dall-E, proyectos revolucionarios de OpenAI. Tras el enorme éxito de este chatbot, que alcanzó el millón de usuarios en tiempo récord, Murati fue ascendida a CTO de OpenAI en 2022.

Desde entonces, ha seguido liderando los avances técnicos hacia la ansiada IA general segura que persigue OpenAI. Cuando Sam Altman fue despedido abruptamente como CEO este noviembre, Murati asumió el puesto de forma interina durante apenas dos días, antes de que Shear la sustituyera, y después Altman retomara las riendas.

Equilibrada entre aceleracionistas y altruistas

A Mira Murati tampoco se la ha visto posicionarse claramente en ninguno de los extremos entre aceleracionismo tecnológico sin restricciones y altruismo que busca evitar cualquier riesgo potencial. Basándonos en sus declaraciones públicas, se podría decir que Murati adopta un punto intermedio prudente: apoya el rápido progreso en IA, pero también la necesidad de garantizar que los sistemas se diseñen de forma segura y alineada con los humanos.

Por ejemplo, sobre ChatGPT y modelos similares ha dicho: “Hoy en día los utilizamos más como herramientas de asistencia. No confiamos en ellos a ciegas, ni del todo. Son más como herramientas que mejoran nuestra productividad y creatividad”. Este comentario refleja un equilibrio entre seguir innovando en IA pero sin dar autonomía total a las máquinas todavía, lo cual se acercaría más a una postura altruista moderada sobre su desarrollo.

Así pues, no hay evidencia firme para decantarnos por etiquetar a Murati como aceleracionista o completamente altruista. Más bien se la podría considerar partidaria de un desarrollo continuado de IA potente pero bajo supervisión y control humanos. Un camino intermedio guiado por la prudencia.

Más allá de su intensa carrera, poco se sabe de la vida personal de Mira Murati, muy celosa de su privacidad. Aficionada al cine y la música rock, esta brillante ingeniera es descrita por sus colegas como tenaz, creativa e implacablemente resolutiva cuando se trata de hacer realidad su visión para la IA del futuro. Y con solo 34 años, lo mejor está claramente aún por llegar.

Algoritmo Transparente #09