Adam D’Angelo, el superviviente discreto de la junta de OpenAI detrás de Poe
Tras pasar por Google y Facebook cofundó Quora, invirtió en startups exitosas de la mano de Sam Altman y ahora se posiciona como un actor relevante en la empresa de ChatGPT
A sus 39 años, Adam D’Angelo ha conseguido mantenerse como el único miembro independiente en la junta directiva de OpenAI después de la crisis que sacudió la organización el fin de semana pasado y con réplicas hasta este martes. Bueno, es un decir, porque durante las últimas horas proliferan informaciones inquietantes sobre los supuestos motivos de fondo que habría tras el despido de Sam Altman, la revuelta interna de la plantilla y su retorno por la puerta grande. En los telediarios de aquí esto sale, la crisis de cinco días en OpenAI, no.
The New York Times resume el pulso de la junta contra Altman y el resultado final como la victoria de los capitalistas. O sea, a lo que aquí llamábamos aceleracionistas o atrevidos con la IA, The New York Times les denomina capitalistas a secas. Pues D’Angelo se encuentra en este sector, a pesar de haber sido uno de los consejeros de la junta que votó a favor del despido de Altman. Las vueltas que da la vida, porque ahora celebran Acción de Gracias juntos. Y el hábil de Adam D’Angelo se queda. Salen las mujeres y entran Bret Taylor (presidente) y Larry Summers.
D’Angelo es cofundador y CEO de Quora, el popular sitio web de preguntas y respuestas que lanzó en 2010 junto a otro exingeniero de Facebook, Charlie Cheever. Pese al discreto perfil público de D’Angelo, Quora llegó a estar valorada en más de 1.800 millones dólares en su momento álgido gracias a su innovador modelo para generar contenidos de alta calidad mediante preguntas y respuestas de expertos.
También está detrás de Poe, una ambiciosa plataforma de inteligencia artificial creada por ex ingenieros de Facebook y Google cuyo objetivo es entrenar modelos de lenguaje similares a ChatGPT especializados en diferentes verticales de conocimiento. (Una herramienta muy recomendable que, además, permite acceder a algunos servicios de IA de manera gratuita.)
Trayectoria brillante desde joven
D’Angelo mostró aptitudes excepcionales para la programación y las matemáticas desde muy joven. Ganó múltiples premios de programación siendo adolescente y se graduó en Ingeniería Informática por el Instituto Tecnológico de California (Caltech) en 2006.
Tras un breve paso por Google, en 2007 fue contratado por Facebook cuando la red social aún daba sus primeros pasos. Con solo 23 años se convirtió en director de tecnología y luego vicepresidente de Ingeniería de Facebook, liderando equipos de cientos de ingenieros.
Discreto pero influyente en Silicon Valley
Tras dejar Facebook en 2009, Adam mantuvo un perfil público discreto centrado en construir y dirigir Quora, evitando los focos mediáticos. Sin embargo, su influencia en Silicon Valley creció gracias a inversiones estratégicas en startups tan exitosas como Airbnb, Lyft, Instacart y Anchor.ai, entre otras.
Y fue precisamente su cercanía a Sam Altman (quien participó activamente en varias de esas rondas de inversión) uno de los factores que facilitaron su entrada como consejero independiente de OpenAI en 2018.
¿Aceleracionista o conservador en IA?
Respecto a su postura sobre el desarrollo de la inteligencia artificial, no hay indicios claros de que D’Angelo sea un “aceleracionista” partidario de impulsar la IA sin freno. Más bien parece decantarse por un enfoque mesurado, que equilibre innovación y seguridad.
Su capacidad para navegar discretamente la reciente crisis lo posiciona como un actor relevante en la compleja gobernanza de OpenAI en los próximos años.
Algoritmo Transparente #05