La primera gran estafa con IA eclipsa una semana de avances y el compromiso de Meta, OpenAI y Microsoft contra la desinformación
Apple goza del lanzamiento de sus gafas de realidad virtual Vision Pro, y Google se juega toda su apuesta de Inteligencia Artificial con Gemini (Bard ya es historia, la primera necrológica de una IA)
Ha sido una semana muy interesante en Inteligencia Artificial. En Algoritmo Transparente os lo explico de manera didáctica y fácil. Los medios de comunicación tradicionales siguen destacando las noticias catastrofistas sobre la IA. Motivos no les falta, ya que esta semana hemos sabido de la mayor estafa perpetrada con IA: 23,7 millones de euros a una multinacional. La cifra es la mayor conocida hasta la fecha. El ‘modus operandi’ también es noticiable, hay que reconocerlo. Un trabajador de Hong Kong recibe un correo electrónico de su director financiero pidiéndole una serie de transferencias bancarias. Para más detalles, le propone una videoconferencia a la que se añadirán otros compañeros. La imagen y la voz clonadas del director financiero y de los otros trabajadores en la videoreunión hicieron caer en la trampa de los ciberdelincuentes al empleado. Es la primera gran estafa con IA. Mucho dinero y más de una persona simultáneamente suplantada con IA.
En Estados Unidos, el Gobierno acaba de declarar oficialmente ilegales las llamadas automáticas con voz de IA. La fiscalía ha situado en Texas el foco de las falsas llamadas telefónicas del presidente Joe Biden pidiendo a los votantes de New Hampshire que no fueran a votar en las primarias. Se trata de Life Corporation, una empresa que ya ha sido sorprendida difundiendo desinformación anteriormente. Biden acaba de nombrar a su exasesora Elizabeth Kelly directora del nuevo Instituto de Seguridad de IA de Estados Unidos. La ofensiva gubernamental contra la desinformación con Inteligencia Artificial está alineada con las grandes empresas tecnológicas que, tras los polémicos ‘deepfakes’ sexuales de Taylor Swift y en un año electoral en Estados Unidos (y en el resto del planeta, como Europa), han salido en tromba a comprometerse en la lucha contra la manipulación y la desinformación.
Esta misma semana, Meta (Facebook e Instagram) ha anunciado a través del blog de Nick Clegg que pondrá marcas de agua a las imágenes generadas con IA que se cuelgen en sus redes sociales, y OpenAI —la empresa de ChatGPT— ha advertido en su blog que las imágenes que tan fácilmente generamos con su DALL·E 3 con simples órdenes textuales de lenguaje natural también contendrán una marca de agua. El problema de poner puertas al campo, más allá del mensaje pedagógico, es que son franqueables: cualquier usuario puede eliminar las marcas de agua fácilmente.
Europa avanza con su ley sobre IA garantista, a pesar del malestar de Francia. Emmanuel Macron quiere proteger a Mistral, y llega un nuevo aviso de Italia a OpenAI por la privacidad de ChatGPT. Sería una lástima frustrar una Mistral española o varias Mistrales europeas.
Europa avanza con su ley sobre IA especialmente garantista, a pesar del malestar de Francia y de su fallido sabotaje a una regulación que convierte la UE en una isla frente a las dos grandes potencias en el desarrollo de la Inteligencia Artificial: Estados Unidos y China. El interés de Emmanuel Macron se llama Mistral. La cesión francesa (tampoco existía unanimidad en el Gobierno) llega pocos días después del nuevo aviso italiano a OpenAI por la privacidad de ChatGPT. Parece que la posición española con la ley europea de IA se va imponiendo. Sería una lástima que ello imposibilitara tener una Mistral española o varias Mistrales europeas.
No conduzcas tu Tesla con las Vision Pro puestas
Esta semana se trataba de hacer ‘scroll’ por nuestras redes sociales para ver aparecer fotos y videos de los primeros usuarios de las gafas de realidad virtual de Apple, las Vision Pro, puestas por la calle, en el transporte público o en la cafetería. Tim Cook acaba de anunciar que este 2024 será el año de apuesta de Apple por la Inteligencia Artificial, y en los primeros días de este febrero ya ha marcado la agenda con sus gafas. Pesan más de medio quilo y cuestan 3.500 dólares. Los más atrevidos se las han puesto al volante de su Tesla, y han provocado una reacción automática de las autoridades de Estados Unidos, que han advertido de la prohibición de usarlas conduciendo. Este hilo de Gustavo Entrala citando la experiencia con ellas de Nilay Patel (The Verge), es miel, y me quedo con este tuit: “Ni siquiera Apple está en condiciones de ofrecer en 2024 un dispositivo de ‘Computación Espacial’ que supere en términos de usabilidad y eficacia al ordenador, al ratón, al teclado o al móvil. Vision Pro impresiona en los detalles hasta que pasa un rato.” Javier Lacort también las ha probado y escribe en Xataka que son el futuro y son espectaculares.
La necrológica de Bard y toda la carne de la IA de Google en el asador de Gemini
La semana ha sido buena para Apple. Ha lanzado un modelo de IA de código abierto para editar imágenes: MGIE. (Para creación de hasta 400 imágenes de alta calidad, tengo pendiente probar Artflow.) Y Meta también apuesta por el código abierto para la Inteligencia Artificial como estrategia ambiciosa, apunta Antonio Ortiz en su artículo en Error500. Justo ahora que Google acaba de meter toda la carne de su IA en el asador de Gemini (este jueves publicaron la necrológica de Bard). Google quiere competir con ChatGPT de OpenAI. Gemini estará disponible en más de 40 idiomas y 230 países, permitiendo a los usuarios interactuar con el modelo Pro 1.0. Además, introduce dos nuevas experiencias: Gemini Advanced y una nueva app. Gemini Advanced se incluirá en el nuevo plan Google One AI Premium por 19,99 dólares al mes, que además de las capacidades avanzadas de IA, ofrece beneficios como 2TB de almacenamiento. Los suscriptores de este plan también podrán utilizar Gemini en Gmail, Docs, Slides, Sheets y más aplicaciones de Google. Los usuarios que pagamos por ChatGPT tenemos ahora un dilema (dónde invertir los 19,99 dólares mensuales de Gemini o los 23,26 euros mensuales de GPT Plus) y un privilegio (sacar provecho de cómo se pone las pilas OpenAI ante la ofensiva de Google).
Le pregunté a la IA de Google cómo se llamaba, y me dijo que se llamaba Bard. Le dije si no se llamaba Gemini y me dijo que sí, que perdón, que ahora ya era Gemini.
Por cierto, hablando con el chatbot Gemini de Google me pasó una cosa curiosa este mismo jueves. Le pregunté cómo se llamaba, y me dijo que se llamaba Bard. Le dije si no se llamaba Gemini y me dijo que sí, que perdón, que ahora ya se llamaba Gemini. Renombrar en la era de la consulta conversacional no es fácil.
Estamos en un momento apasionante. GPT se quiere meter en nuestro móvil para matar Alexa y Google Assistant. Pero a Google le crecen los enanos en la redefinición de las búsquedas. Me explico: ahora ya no vas a Google a buscar información. Ahora preguntas a tu chatbot y este te proporciona la información, sin publicidad, sin el ‘clickbait’ y sin el ruido inducido por el SEO. El enano se puede llamar Perplexity. O se puede llamar Arc Search. Por tanto, hace bien Google de apretar con Gemini (aunque, ojo con la privacidad).
Microsoft y Semafor lanzan noticias con IA, y ya podemos entrar a la red social de Jack Dorsey
Después de todo el escándalo de la demanda de The New York Times a OpenAI y Microsoft por la supuesta vulneración de los derechos de autor del periódico en el entrenamiento de los modelos de IA —que ya veremos como acaba porque lo que explicó Carlos Santana en su último video (¿La IA Generativa plagia a los artistas?) da base sólida a un debate técnico profundo en el litigio legal—, Microsoft se ha aliado con Semafor, el nuevo medio de Ben Smith, para lanzar un servicio de noticias con IA llamado Signals.
Más medios apostando por una IA bien integrada en su redacción y en su producto. Más redes sociales descentralizadas, también. Acabo de incorporarme a una nueva red social tras la llegada de Threads a Europa. Se trata de Bluesky. Ya podéis crear vuestra cuenta sin invitación en esta aplicación. Bluesky es la revancha del fundador de Twitter Jack Dorsey a Elon Musk, y un nuevo intento de desbancar a X. A diferencia de Threads (Meta), me parece que en Bluesky será más difícil acumular seguidores. A riesgo de equivocarme, diría que es más bien un Mastodon que no un Threads que tiene la facilidad de importar y sugerir tus seguidores y contenido en y desde Instagram. Creo que los nostálgicos de los inicios del Twitter de @Jack Dorsey le debemos el favor y que hay que darle una (más) oportunidad a la (otra) red social.
Todo lo (bueno de la IA) que no te explican los medios de comunicación
Mientras los medios de comunicación tradicionales os explicarán las estafas multimillonarias con IA no tendrán espacio para explicaros que Microsoft formará a 2 millones de indios en IA y promociona un modelo superior a GPT-4, ni que Roblox introduce la traducción de chat en tiempo real con IA para conectar a jugadores, ni que Cambridge premia 5 proyectos de IA en fertilidad, clima y salud mental, ni que la IA descifra un pergamino griego antiguo, ni que Metomic lanza un plugin de ChatGPT para proteger datos sensibles de las empresas, ni que aparece un modelo para la detección de edificaciones urbanas en imágenes satelitales, ni que DeVry University impulsa la revolución educativa con su laboratorio de IA, ni que la IA impulsa el renacimiento inmobiliario de San Francisco, ni que Riffusion innova creando música a través de la IA, ni que un bebé enseña lenguaje a una IA, pero quizá sí que te explicarán que un hombre usa ChatGPT para ligar por Tinder y hace 'match' con 5.239 mujeres.
Gracias a los nuevos suscriptores de Algoritmo Transparente. Gracias también a Tomás Cascante de BarcelonaDot por incorporarme a su espacio TESTIMONia, por publicar estos boletines e invitarme a su programa El món és digital. ¡Hasta la semana que viene con más novedades y análisis de Inteligencia Artificial, tecnología y medios!
[La primera gran estafa d’IA eclipsa una setmana d’avenços i el compromís de Meta, OpenAI i Microsoft contra la desinformació, en catalán]
Algoritmo Transparente #19